Del 6 al 16 de noviembre en las instalaciones del CENART tuvo lugar la 35 edición de la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil, una feria que me encanta y que no dejo de visitar y recomendar desde que soy mamá.
Como mamá y profesional de la familia, he encontrado que la lectura y los libros son la herramienta ideal para el desarrollo del vínculo familiar.
Luego de participar en una convocatoria y de ser seleccionados, tuvimos la gran suerte de ser talleristas de la bebeteca de la #filij2015 y de asistir al seminario de fomento a la lectura que cada año se lleva a cabo en el marco de la feria.
El seminario consideró para su 35 aniversario trabajar la conjugación familia y lectura; pues, es el círculo familiar el mejor lugar para comenzar a amar la lectura, además de que esta provee a las personas, incluso a los niños de sentido para la vida.
En la bebeteca fue muy claro para nosotros, como talleristas, observar cómo padres e hijos se vuelven cómplices de las historias, imaginan, sueñan y ríen juntos.
La temática nos vino como anillo al dedo y metimos en la maleta muchos aprendizajes que poco a poco estaremos compartiendo con ustedes que aman leerle a sus chiquitos.
Mientras tanto aquí les dejo un brevísimo pero rico resumen:
– La lectura permite a los niños ser protagonistas activos de un mundo que exige capacidad de interlocución.
– La lectura en la familia está llena de recuerdos familiares en los que se pacta un armisticio para escuchar al padre o madre consagrado a sus hijos.
– Los padres nos convertimos en mediadores de la lectura para los más pequeños y es importante que como mediadores recordemos que más allá de la verificación de que detalles recuerdan de la lectura, nos aseguremos de que disfrutan y viajan con la narración, para ello necesitamos formarnos también como lectores.
– Si bien, cada vez hay mas formas de leer (dispositivos electrónicos) debemos de asegurar que a pesar de la tecnología, el encuentro (con el autor, así como el diálogo o debate que la lectura provoque) y la lectura profunda permanezcan a pesar de los medios.
La lectura es un detonante de la creatividad, es por ello que cantos, arrullos, cuentos y poemas no deben de faltar en casa.
Felices lecturas!